COLEGIO SANTA MARÍA DEL NARANCO 36 vs 57 IES ELISA Y LUIS VILLAMIL 21 de noviembre del 2015
DOMINANTES POR MOMENTOS
Se estrena el encuentro con el conjunto visitante muy seguro de sí mismo, pese a lo que digan los resultados anteriores. Pocos pases, pero a situaciones claras y a jugadores que trabajan para recibir y tirar en buena posición. Pese a todo, el arranque es frío y con poco acierto y menos puntos en la fría mañana de Oviedo. El equipo anfitrión amasa mucho la bola en bote y pases exteriores, y le cuesta anotar; las ayudas defensivas del rival hacen mucho por ello. Aunque cuenta con las faltas innecesarias y los tiros libres gratis que concede el oponente. Pocos puntos y poco ritmo en estos minutos de tanteo.
El segundo cuarto arranca con claro dominador. Los de occidente meten balones interiores y juegan en 1×1 tanto en contras como afrontando defensa estática. Amenazan con romper poniéndose 11 arriba. No se prolonga. Los capitalinos reaccionan, y suman pisando la zona en bote y continuando siempre hacia el interior, mientras a los de Vegadeo les cuesta mantener la continuidad de la fase inicial, con algo de relajación. Así se recorta las distancia con un 13-2 para mantener el resultado en vilo al descanso.
En la reanudación no hay color. Un equipo sale mucho más enchufado que otro. Se conjugan la actividad e intensidad en ataque y defensa de los visitantes. Ayudas, negar la zona, rebote y velocidad para anotar fácil. Balones interiores y puntería en el tiro tras los pases doblados al exterior. Un despliegue de baloncesto total, aunque breve. Los colegiales no ven la manera de romper la defensa, con bote y sin opciones de tiro claras. Un 4-22 define la diferencia en este parcial incontestable. Solo tres canastas finales en el último minuto con amago de tímida reacción ponen la victoria en duda.
El último cuarto carece de sentido común en las decisiones de los visitantes. Un equipo lucha a la desesperada por remontar, con defensas y presiones alternas, y acciones rápidas, con más o menos acierto. Así provocan recuperaciones y tiros claros. Mientras tanto, con aparente miedo a ganar, los de Vegadeo rifan los pases, juegan con ansiedad y la vista en el suelo, y no son capaces de parar el partido e imponer el ritmo conveniente. En estos diez minutos no hay ningún ataque de más de dos pases o que se extienda por encima de los 5 segundos. Así, en un correcalles donde la precipitación de unos está justificada y la de otros no, los fallos locales y canastas puntuales de los de occidente, mantienen la diferencia y aseguran el triunfo.
La aceleración final es prescindible. Porque encima deja una sensación de ansiedad y regustos amargos. Cada uno buscando su tiro, con obsesión en el bote y el lanzamiento precipitado, sin mirar a los compañeros ni defensores, sin respetar los tiempos del partido y sin lectura de juego. Debemos saber seleccionar cuándo conviene correr y cuándo parar y jugar. Y nos cuesta generar ataques donde el balón cambie de lado con paciencia. De forma irónica y contradictoria, cuanta más deprisa queremos correr, menos nos movemos y avanzamos. Pero eso son solamente los minutos finales. La concentración mejoró. La defensa colectiva ha mostrado una evolución y eso permite dominar el rebote gracias a las ayudas y a cerrar la zona. Trabajo de equipo. Y a mejor defensa y rebote, más contras, y más ataques posicionales con claridad y ánimo. Porque el baloncesto colegial es un estado anímico constante. Hemos hecho algo difícil y que aún no habíamos demostrado, poner el balón en la mejor situación posible para anotar, tanto por parte del pasador como del receptor. Pero tenemos que obligarnos a pensar cada jugada y no darlo por hecho. Ofrecer líneas de pase, continuar las jugadas, buscar al compañero libre, marear la defensa.
Hay que darle también mérito al conjunto local que afrontó el partido con sólo 6 jugadores.
Pese a los despistes y altibajos normales en la categoría y edad, las sensaciones mejoran sin confiarnos. Esperemos reafirmar estas palabras en el próximo partido. Un primer triunfo elaborado y merecido. Enhorabuena a los chavales.
IES Elisa y Luis Villamil: 2 Lucas (14); *5 Dani (2); *9 Nico (6); *13 Armando (2); *14 Manel (7); *35 Alex (26); 37 Carlos (0); 41 Álvaro (0); 99 Pablo (0). 3 de 7 tiros libres, 2 triples anotados, 15 faltas cometidas. Alex eliminado.
Colegio Santa María del Naranco: *2 Díaz (4); *4 Lancheras (0); *7 García (0); 10 Fernández (15); *27 Arias (2); *32 Antolín (15). 4 de 12 tiros libres, 2 triples convertidos, 14 faltas señaladas. Fernández eliminado.
Parciales: 5-10; 15-12; 9-24; 7-11.
Árbitros: Baquerín. Mesas: Local.
Incidencias: Partido disputado el sábado a las 10 horas en el Colegio Santa María del Naranco de Oviedo.
Mira que no fui y es como si hubiese estado allí. Muy buena crónica!